La flexibilidad y la seguridad, son dos conceptos que se han hecho especialmente importantes en la nueva realidad laboral, en la cual las personas buscan lugares de trabajo que les permitan tener estabilidad pero a la vez, donde sientan seguridad sin importar el contexto o las circunstancias.
Es por esto que hoy es importante rescatar el esquema de “flexiseguridad”, para entenderlo, probarlo y confirmar por qué puede ser altamente benéfico para Latinoamérica y para el mercado laboral mexicano.
Qué es la flexiseguridad
Comencemos por definir este concepto que aún es nuevo en el mundo del trabajo.
La flexiseguridad es un esquema que nació en la Unión Europea, que busca una mayor flexibilidad en las empresas en cuanto a la adaptación al cambio, así como una mayor seguridad para las y los trabajadores, en cuanto a la posibilidad de encontrar un empleo estable. Pero ¿cómo se traduce esto?
En palabras de Francisco Martínez Domene, CEO de The Adecco Group México, su principal objetivo es crear un mercado laboral formal y flexible en donde no existen restricciones para la contratación de personal.
Esto quiere decir que las personas que pierden su empleo, por un lado, reciben un apoyo durante el tiempo que se encuentran sin empleo y a su vez el estado en alianza con la iniciativa privada, ofrecen formación gratuita y de calidad de manera continua. Así, las personas pueden mejorar sus habilidades y aptitudes para incrementar las posibilidades de su colocación.
Por qué implementarla en las empresas
Brindarle seguridad a las y los trabajadores es primordial para crear una cultura de trabajo competitivo. De esta manera, se promueve el empleo formal, se sanciona la informalidad y se prioriza la formación y desarrollo de la fuerza laboral en todos los frentes.
Además esta capacitación y formación no se daría solo en temas de conocimientos, sino también en cuanto a habilidades emocionales e interpersonales.
Para que la flexiseguridad sea una realidad en México, la regulación de empresas de trabajo temporal formal es fundamental, ya que solo así, a las empresas les será fácil contratar de manera formal, sin importar que sea un contrato por proyecto o de poca duración. Es decir, regular el trabajo flexible y formal, acompañado de un plan único nacional de upsklling & reskilling.
Beneficios de la flexiseguridad
Algunos de los beneficios que nos brindaría el esquema de flexiseguridad, son:
- Promueve el empleo formal.
- Brinda oportunidades de empleo a grupos de personas que tienen más barreras al buscar un empleo, como las y los jóvenes, mujeres, personas de la comunidad LGBTTTIQ+ y personas mayores de 45 años.
- Adaptación al cambio por parte de las empresas.
- Reducción en el periodo de búsqueda y colocación en un empleo (2 meses aproximadamente).
- Procesos de contratación más ágiles y sencillos.
- Oportunidades reales de capacitación continua y de calidad para toda la fuerza laboral.
LaLa flexiseguridad brinda beneficios tanto a empresas como a las y los trabajadores, sin embargo se necesita que ambas partes entiendan este esquema y cooperen para que funcione. Por un lado, las empresas deben percibir al trabajador/a como un activo que aporta valor al trabajo y no como un costo; pero por otro lado, las y los trabajadores deben considerar que el tiempo de permanencia en una empresa podría ser mucho menor a lo que conocían normalmente, y por lo tanto, deberían mantenerse abiertos a nuevos contextos laborales, a continuar aprendiendo y a actualizarse para mantenerse vigentes en el mundo laboral.
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